Por: Gabriel Ruiz
“El bombardeo en todos los frentes de la cultura, promoviendo el libertinaje sexual, que es sin duda el gran negocio del siglo, tiene a la castidad como a la pobre muñeca fea…”
La Torre de la Virtud
En el siglo pasado se corrió el rumor de que la torre Eiffel, símbolo de la unión, el progreso y del orgullo francés, debía ser derribada, pues estaba enmohecida y podía representar un riesgo para las personas, y aunque sólo fue un rumor, desde entonces se tienen procesos científicos, muy celosos, para evitar la corrosión. Entre muchas otras cosas, cada año le aplican 50 toneladas de pintura, todo esto para evitar que la torre se enmohezca.
Lo que en un tiempo fue símbolo de virtud y orgullo de las familias, la Castidad, está enmohecida. ¡Jóvenes!, La corrosión debilita lentamente la fuerza del acero, hasta hacerlo polvo, ¡el tiempo de rescatar la torre de la virtud, ha llegado!, debemos de evitar el derrumbe de lo más sublime de la sexualidad humana, la torre de la castidad, símbolo de las virtudes de pureza, honestidad, recato, virginidad, decencia, integridad.
El bombardeo en todos los frentes de la cultura, promoviendo el libertinaje sexual, que es sin duda el gran negocio del siglo, tiene a la castidad como a la pobre muñeca fea: “escondida tras los rincones, temerosa que alguien la vea”. Hoy los jóvenes, ya sea hombres o mujeres, que se mantienen íntegros y luchan por mantener una vida de castidad, son una minoría, van contracorriente y son señalados.
¡Sacudámonos el polvo, levantémonos, desentumamos las articulaciones, estiremos brazos, pies y cuello y dispongámonos para la lucha!, ¡vamos al rescate del gran tesoro, de la joya empañada, la castidad!, de la virtud del joven que ha descubierto que; “libre no es el que hace lo que quiere, sino el que quiere lo que hace”, y que libre no es el que se entrega al desenfreno de las bestias de su instinto, sino el que gobierna sus emociones y sabe utilizarlas para que estas lo lleven veloz y ordenadamente en el carruaje de su vida.
Julio César, el gran conquistador, defendió con vehemencia y gran retórica a su esposa en el juicio en el que la acusaban de adulterio, logrando que los jueces la declararan inocente. Sin embargo, al día siguiente, se divorció de ella, ¿Por qué preguntaron sus amigos?: “Porque la mujer del César no basta con que sea casta, debe parecer casta”, les dijo. La castidad, virtud de reinas y princesas, que al igual que ellas, parece estar en desuso.
Lo que es valioso en sí mismo proporciona riqueza a quien lo posee, por eso los y las jóvenes que viven una vida de castidad se llenan de optimismo, alegría, tranquilidad y paz interior.
La historia hace patente la ruina de las naciones y el fracaso de los grandes proyectos, por la lujuria y desenfreno de sus líderes. Para ello basta la muestra del imperio romano, la monarquía francesa con el rey sol, la Inglaterra de Enrique VIII, el rey Herodes y muchos más. La castidad es fuente de fortaleza moral y emocional de los líderes.
El joven que aprende a dominar el propio ser, doma a las bestias del instinto y les da su espacio y tiempo adecuados a los arlequines del placer; encuentra el equilibrio necesario para afrontar las adversidades, obtiene la calma para tomar las decisiones trascendentes, esculpe en sí mismo el coloso, la gran estatua que Dios tenía pensada para él. Este joven tendrá la fortaleza y aplomo para guiar como un auténtico líder a nuestra sociedad.
¡El tiempo ha llegado!… ha llegado el tiempo de limpiar la torre de la virtud, de evitar que la castidad se vuelva a enmohecer, de dar un rostro humano a la sexualidad y despojarla de la careta animal que le hemos puesto.
Toda inflación provoca una devaluación. Por lo tanto, entre más inflamos la cultura de libertinaje sexual, más devaluamos el hermosísimo regalo de la sexualidad humana; devaluado vamos de harapos al banquete.
¡El tiempo está aquí! No esperemos, recuperemos el gusto por lo nuevo, el placer por desenvolver el gran regalo. Es tiempo de regresarle lo sublime al amor, la plenitud al sexo y de revaluar la donación completa y definitiva de los esposos.
El pudor femenino, ¿es obsoleto?
A Juana de Arco, una campesina vestida de armadura, se le conoce mejor leyendo el juicio inquisidor que la condenó a muerte, que atendiendo a sus victorias militares. El rey Carlos VII, frívolo, receloso y malagradecido, la entrego a manos enemigas. Los ingleses le temían más a ella que al ejército francés y no dudaron en buscar un pretexto para condenarla a muerte. El gobierno en contubernio con jerarcas de la Iglesia católica, la sometieron al juicio de la inquisición, para quemarla por blasfemia o herejía.
El Obispo Couchon después de un complejo y sofisticado juicio, no teniendo más pretexto para acusarla que el hecho de portar armadura y espada propia de la vestimenta varonil, intentó alegar que vestir como hombre era una insumisión a la Iglesia.
Era conocido entre las tropas que Juana de Arco había hecho voto de virginidad al salir de su pueblo natal, y que había conservado heroicamente su virginidad durante las campañas militares. Siendo joven, bella y la única mujer en la campaña, había muchos oficiales que la pretendían.
Al ser acusada de vestir con armadura, propio de los hombres, ella respondió con gran aplomo y sencillez, “He decido utilizar esa vestimenta para llevar a cabo mi misión más cómodamente, y resguardar mi virginidad no provocando el deseo de mis oficiales”.
Juana de Arco conocía el valor de lo íntimo, y su pudor la defendía ante el peligro de provocar el deseo de ser abusada. ¡Sí jóvenes, eso es el pudor!, una armadura que protege ante el riesgo de provocar un deseo sexual, de ser desnudada mentalmente. El pudor no sólo defiende y protege la dignidad de la mujer, sino también la del hombre que debe respetar y darse a respetar.
El ser humano está llamado a provocar el amor. Somos valorados por lo que mostramos de nosotros mismos, si nos mostramos relevantemente por el cuerpo, por el físico seremos valorados, el amor que así nace será quebradizo y pronto se desvanecerá. Hay jóvenes que me han expresado con desesperación, diciendo; ¡No soy sólo cuerpo, soy ante todo un ser humano! No se trata de encerrarnos y despreciar el cuerpo, sino de esperar para entregar en exclusiva y sublimemente, algo muy valioso que no es del dominio público.
¿Por qué envolvemos los regalos?, ¿Por qué el cineasta esconde celosamente la trama y contenido de su película hasta el día del estreno?, ¿Por qué los arquitectos cubren las entradas para que el diseño sea contemplado hasta que se está en el interior?, Se trata del famoso “efecto ¡wow!”, que se da cuando lo que se entrega no pertenece al dominio público, sino que espera hasta que se puede mostrar de manera completa e integral; el regalo, la película, la obra de arte y por supuesto la persona en su total y sublime belleza.
El libro “Los Bandidos de Rio Frío” de Manuel Payno, tiene un capítulo completo donde describe cómo uno de los personajes se exalta y excita cuando por accidente Alicia muestra la pantorrilla, el hombro y los pies descalzos. En esos tiempos la falda se llevaba hasta el tobillo y los hombros se llevaban cubiertos. Todo el cuerpo femenino es hermoso; descubrirlo poco a poco será siempre emocionante.
¿Cuánto puede o debe mostrar la mujer con su vestimenta?, La respuesta es sin duda cultural: Donde hay más calor, la mujer viste mucho más ligera que donde la nieve o el frio la obligan a estar absolutamente cubierta. Cuánto debe cubrir y qué tan ceñida debe ser la ropa, es una cuestión muy relativa, pues depende del lugar, la hora, el clima, las costumbres o la ocasión. Lo esencial es que el cuerpo no exprese: “soy un objeto del que te puedes servir sin amarlo”.
Bien sabemos, que la mirada tiene un sentido posesivo, constituye una especie de tacto a distancia. De este modo, toda mujer percibe perfectamente lo que siente el hombre que la mira. No es la mismo la sonrisa coqueta del “me gustas”, que la mirada libidinosa que hace sentir a la mujer que quieren desnudarla.
¿Cómo vestir?, del modo que se provoque un amor noble y no un amor lujurioso.
Muchas mujeres se deleitan en sentir que provocan deseo sexual, y les gusta sentir que las desnudan con la mirada. Ellas han perdido el pudor y su inseguridad las orilla a probarse que son capaces de provocar la atracción del hombre con la exhibición de su cuerpo, su seguridad se finca en lograr la mirada licenciosa de los hombres, pero el amor que así nace, como un espejismo, se desvanece rápidamente, dejando a su paso un vació existencial y una mayor inseguridad.
El pudor se vuelve obsoleto por la explotación comercial de la sexualidad y la desnudez, en la antigüedad este negocio se limitaba a la prostitución, hoy ha invadido todos los rincones de la cultura; con la publicidad impresa de revistas, periódicos, espectaculares carreteros, comerciales de la televisión, películas y series televisivas; Con la venta de condones, de juguetes sexuales, de medicinas para el sida y para la gran cantidad de enfermedades de transmisión sexual; la venta de pastillas del día siguiente, fabricación de equipo médico y medicamentos de la jugosísima industria del aborto; los moteles, la industria del vestido y muchas más.
La sexualidad humana es ahora materia prima para el comercio y la industria, y es sin duda el negocio del siglo, pues destila jugosos beneficios para los que han decidido explotarla. Estos beneficios se reciben a costa de la pérdida del virtud del pudor y el valor de la dignidad humana, en especial la femenina, han destruido el valor de lo íntimo: nos muestran y utilizan el cuerpo humano como un objeto del que se puede uno servir sin necesidad de amarlo; lo cosifican, y pregonan que el cuerpo puede ser usado sin necesidad de amor.
¡Señorita, vales mucho!, vales por lo que eres, por lo que piensas, por tu capacidad de amar, por tus cualidades, por tu capacidad de comprensión, por tu sensibilidad, porque eres templo del espíritu. ¡Eres única especial e irrepetible! Una obra maestra de Dios, tu físico es hermoso solo por ser mujer, ¡descubre el encanto del pudor!, la seguridad, la tranquilidad, la dignidad que te proporcionará, la feminidad y el coqueteo natural de tu esencia te hacen hermosa, ¡puedes ser una mujer pudorosa y muy atractiva!.
¡Jóvenes, rechacemos la manipulación de la que somos objeto! Rechacemos el comercio que utiliza la sexualidad y el cuerpo humano como si fuese una cosa que puede ser usada sin respeto ni amor.
El día después… la cruda, la resaca.
Toda ola tiene su resaca, todo abuso su cruda o depresión y todo terremoto su derrumbe, esta no es la excepción: Con la castidad enmohecida y el pudor obsoleto, ahora tenemos que hacer frente a terribles problemas de salud social: sida, gonorrea, hepatitis b, clamidia, virus del papiloma humano, tricolomas, sífilis, embarazos no deseados, infidelidades, familias destruidas, elevados índices de divorcios, terrible soledad en la edad adulta y angustiosa en la vejez; abuso sexual de menores, aumento en la práctica homosexual, incestos, hijos abandonados y muchos más problemas de salud social.
En la desesperación por solucionar estos problemas, todos luchan desde su trinchera; La sociedad civil ha creado fundaciones y fondos para ayudar a resolverlos: Los legisladores se empeñan en resolver la situación a base de emisión leyes y nuevas leyes. Ante esta tragedia los gobernantes hacen campañas de vacunación, de promoción de anticonceptivos, de educación sexual, campañas, campañas, programas y programas y nada se resuelve, más bien parece hacerse aún más profunda la grieta.
Pero… ¡si la solución nos la dieron hace 3000 años! Cuando un barbudo perdido en la montaña, bajó con dos tablones de piedra, esculpidos con la ley de Dios, que en el sexto renglón tenía un consejo de felicidad que decía “No cometerás actos impuros”.
El matrimoniolight
La cultura del todo sin esfuerzo nos ha invadido: Todo light, come lo que quieras sin engordar, aprende inglés dormido, moldea tu cuerpo sin esfuerzo con electrodos o parches; píldora para dejar de fumar sin esfuerzo, etc. Todo es desechable, úsese y tírese, el mundo del amor no ha podido mantenerse ajeno esta peste social de mediocridad. Así pues, ahora algunos jóvenes buscan sexo sin amor, amor sin compromiso, compromiso sin consecuencias.
La Castidad enmohecida y esta cultura de mediocridad “light”, invitan a nuestros jóvenes a vivir la vida haciendo de lado la lucha, el compromiso, la fuerza de voluntad y el esfuerzo; llevándolos a explorar la opción del matrimonio light, técnicamente conocido como amasiato o unión libre, libre de compromisos, sin casarse ni legal, ni espiritualmente.
La unión libre, que es una de las tristísimas distorsiones de la familia, donde los jóvenes deciden vivir y procrear “libremente”:
- Sin compromisos de fidelidad mutua… ¿Libre para involucrarse sexualmente con otro?
- Sin compromiso con los hijos… ¿libre para abandonarlos y dejarlos con el otro conyugue?
- Sin compromisos personales… ¿libre de luchar o no por los tuyos?
- Sin compromiso de exclusividad sexual… ¿libre de copular con cualquiera, como los animales?
- Sin compromiso a Luchar… ¿libre para abandonar al otro, al primer problema?
- Sin compromiso económico… ¿Libre para dar o condicionar la ayuda económica?
- Sin compromiso para edificar un hogar… ¿libre para irme con otra u otro si hay problemas?
¡LIBRE PARA NO TOMAR LA RESPONSABILIDAD!
¡LA UNION LIBRE ES UNA GRAN INJUSTICIA! El matrimonio se instituyó para proteger a la madre, MATRI que viene de MADRE, MONIUM que significa RELATIVO A. En la antigua Grecia y en Roma era un contrato firmado entre el padre de la esposa y el novio, para asegurarse que el novio cuidara a la madre y a los hijos. En todas las culturas se ha acompañado de una ceremonia solemne. El matrimonio a través de toda la historia, ha tenido como finalidad la protección de la mujer, los hijos, del patrimonio, la cultura y las buenas costumbres.
¡Jóvenes: no tengan miedo al compromiso! Si se aman, si lo que quieren es formar una familia, si ya tienen hijos, si les gusta vivir juntos, ¡ánimo! ¡Todo o nada!, “…porque no sois ni fríos ni calientes os vomito de mi boca”, son las proféticas palabras del Apocalipsis.
Si nos amamos, ¿Qué tiene de malo tener relaciones sexuales?
Que sofisma más perfecto, amor y sexualidad, ambos maravillosos y sublimes, ambos regalos divinos, ¡cómo puede hablarse de maldad!
La economía del comportamiento, regida por “haces lo bueno y dejas de hacer lo malo”, o: “las cosas malas son pecado y cuidado porque te vas al infierno”, además: “son pecado porque la iglesia o los mandamientos lo dicen”, es una postura de corte totalmente conductual y útil para educar niños. “¡Eso no funciona con nosotros!” dicen los adolescentes, “queremos razones, profundidad, explicaciones”, nos reclaman a sus formadores.
Si la sal es vital para el cuerpo, ¿Qué tiene de malo comerla?, La sal y comer son buenos, ¿cómo puede haber maldad en ello? Pero si comemos mucha sal, vomitamos, ¿no?, Si le ponemos sal a la leche sabrá horrendo ¿No es así?, ¿Por qué no lo hacemos? porque sabemos perfectamente las consecuencias del mal uso de la sal.
Hay muchos guisos en los que la sal no se pone en cualquier momento del proceso de cocción, como los frijoles, si se pone antes de tiempo el guiso queda duro. Igual es la sexualidad todo a su tiempo y con la debida medida.
En la economía del comportamiento adolescente, se hace o se deja de hacer, no función de si es bueno o malo, sino en función de consecuencias, que el adolescente debe saber descubrir. ¡Ahí el gran reto de los formadores, padres, maestros y tutores!
Joven: reformula la pregunta: SI NOS AMAMOS ¿Qué consecuencias tiene que tengamos relaciones prematrimoniales? Antes de tener reaciones sexuales con tu novio o novia, hazte todas, las siguientes preguntas y después valora las consecuencias y toma la decisión.
- ¿Qué tiene de bueno para ti y para su relación como novios?
- ¿Tener relaciones sexuales contribuirá positivamente para el futuro de su relación como novios?
- Si quedan embarazados, ¿están listos para ser padre y madre?
- Una experiencia sexual puede ser muy agradable o muy desagradable, ¿están preparados para que la experiencia pueda ser muy desagradable?
- ¿Han platicado fría y abiertamente, sobre cómo hacerlo, que hacer, los detalles, lo que quieren y lo que no quieren, lo que les gustaría y lo que no les gustaría?
- ¿Han platicado y tomado compromisos formales sobre lo que harán si se embarazan o si alguno contrae una enfermedad, o si en el futuro rompen el noviazgo?
- Si finalmente no haces un compromiso de vida con él o con ella, ¿cómo te vas a sentir después?
- ¿Has pensado que puede suceder si el día de mañana terminas con tu novio o novia, y el o ella le platica tus intimidades a sus amigos o tus amigos, y peor aún, a tu nuevo novio, esposo o esposa?
- ¿Tener relaciones sexuales con tu novio, es algo bueno para ti y para tu vida? ¿Se lo platicarías a tu futuro esposo o esposa?
- ¿Has pensado que puede ser un minuto de placer a cambio de una vida de arrepentimiento?
- ¿Has pensado en las consecuencias que habrá? Si tu novio o tu novia te contagia de una enfermedad de las muchísimas que existen y tienen consecuencias fatales, y que quizás él o ella ni sabe que la tiene.
- Antes de decidir tener relaciones, ¿no sería bueno hacerse análisis médicos, para saber que ambos están sanos?
- Tener relaciones prematrimoniales, ¿contribuye al logro de tus planes de vida y a alcanzar tus sueños?
- ¿Tienes claro que ningún método anticonceptivo es 100% seguro, ni contra embarazo ni contra infecciones de transmisión sexual?
- La sexualidad tiene la virtud fortalecer el nexo de unión entre las personas, pues al entregar la intimidad el uno al otro, se forma una especie de eslabón que los ata. Si en el futuro deciden que no son la una para el otro y terminan, ¿Tienes claro que será mucho más difícil y doloroso romper, que quedarán muy heridos después de haber tenido relaciones sexuales?
- ¿Estás convencida que es bueno para ti, que quieres hacerlo y que no lo haces por complacer a tu pareja?
- ¿Se lo pides a tu pareja porque la quieres o porque quieres satisfacerte?
- ¿Te lo pide porque te quiere o porque quiere satisfacerse?
- ¿Tienes claro que unas experiencias de relaciones sexuales dejan una huella imborrable en la vida de las personas y que no hay marcha atrás?
- ¿Están listos y preparados para esa experiencia?
- ¿Sabes que una relación sexual satisfactoria y maravillosa normalmente requiere un largo proceso de adaptación, a veces de años, así como el conocimiento profundo del uno con el otro? Así pues, ¿estás consciente que lo más probable es que no sea maravilloso desde la primera vez?
¡Joven! La sal es el condimento por excelencia, hace la diferencia fundamental en la comida: los frijoles sin sal son repugnantes, pero los muy salados también saben feo. Igual es el sexo en el amor: debe agregarse en el momento adecuado, con la dosificación idónea y con la persona correcta, ¡todo a su tiempo!
¿Cuál es la diferencia sustancial en la sexualidad humana y la animal?
Lo que diferencia la sexualidad animal de la humana es el objetivo: en el animal, la finalidad es la reproducción, por eso se reproducen y se van; en el Humano es el engrandecimiento del amor, los hijos y la familia son el fruto de ello, por eso padres e hijos quieren permanecer juntos.
Si preguntamos a cualquier grupo de gente: ¿Cuáles la cualidad indispensable para que un matrimonio matrimonio permanezca unido, el que todos anhelaríamos? Habrá toda clase de respuestas, solo hay una característica en la que siempre, todos los grupos y personas coinciden, y es La Fidelidad.
Siendo la Fidelidad un ingrediente fundamental para el éxito del matrimonio, ¿Por qué educamos a los jóvenes a manejar la sexualidad como un instinto animal, les decimos o les damos a entender: “si tienes ganas busca con quien, o bien satisfácete y desahógate masturbándote”? Esto lo decimos implícita o explícitamente. Al no decir nada, validamos los mensajes que le dan los medios de comunicación.
Si queremos educar a los jóvenes para una sexualidad cuya finalidad es el amor y la fidelidad matrimonial, ¿Porque les decimos? o les damos a entender: “si lo vas hacer, al menos usa condón”, ¿Les decimos eso por falta de razones? ¿No podríamos decirle?; que hoy está construyendo el esposo o la esposa de mañana, que si no es capaz de gobernar su cuerpo y decir ¡no!, cuando toca decir no, cuando esté casado y requiera rechazar la tentación no podrá hacerlo.
En el momento que el deseo sexual llame y su esposo o esposa esté enfermo, no tenga ganas o esté de viaje, tendrá y deberá decir ¡no!, para mantener la Fidelidad eterna e incondicional prometida el día del matrimonio, para mantener así la unión familiar.
¡Joven! Prepárate desde hoy para tener un matrimonio exitoso, una familia hermosa y ser felices; no repitas los fracasos que todos los días ves a tu alrededor en las familias, causados simplemente porque de jóvenes no vivieron una vida de castidad, no aprendieron a gobernar a la bestia del instinto y al arlequín de los placeres. Ahora ya casados, se les desbocaron y no pueden vivir una vida de castidad matrimonial.
Los jóvenes preguntan
A través de muchos años de trabajar con adolescentes, he encontrado que siete preguntas compendian las inquietudes de la mayoría de ellos.
- ¿Si hay amor, que tiene de malo tener relaciones prematrimoniales?
- ¿Por qué es malo masturbarse?
- ¿Qué hay del clímax y el Orgasmo?
- ¿Qué hay de los desórdenes sexuales, pedofilia, homosexualidad, sexo anal, etc?
- ¿Es malo el cibersexo?
- ¿Qué hacer con el acoso sexual?
- ¿Hasta dónde se puede llegar con las caricias y abrazos?
Estas preguntas en diferente formato y claridad son una síntesis de cientos de preguntas que han hecho por escrito los adolescentes, de las relaciones prematrimoniales ya lo comenté anteriormente, por lo que solo intentaré dar respuesta a las otras seis.
¿La masturbación es mala?…
Me permitiré, en este capítulo, hablar de la masturbación masculina, que es lo que se pregunta más frecuentemente.
En la actualidad, hay muchas corrientes psicológicas que promueven la masturbación entre los jóvenes, aduciendo que permite liberar la tensión a la que están sujetos por los cambios hormonales, que les permite aprender a estimularse, a conocer mejor su cuerpo y se preparan para satisfacer mejor a su esposa.
Comenzaré por decir que Sigmund Freud, a pesar de su reduccionismo al explicar al hombre casi exclusivamente desde el sexo, define la masturbación como “el vicio solitario” y decía “existe el riesgo de bloquear el desarrollo y maduración de su psico-afectividad”.
Haberlo hecho alguna vez como algo esporádico, puede ser inocuo y no tener consecuencias ni emocionales, ni físicas, pero la sexualidad en la medida que se estimula tiende demandarlo de nuevo, por eso es que Freud le llamaba vicio, al igual que algunas drogas, por consumirlo alguna vez, no se adquiere el vicio, pero cada que se consume se aumenta la propensión. Es por eso que invitarlos a la práctica de la masturbación es dañino e irresponsable por parte del formador.
Comentaremos esto, atendiendo a la economía del comportamiento, en el que este se rige por la valoración de las consecuencias, en lugar de regirse por si es bueno o malo. La pregunta debe formularse como “¿Qué consecuencias tiene masturbarse?
Con la masturbación frecuente, el cuerpo aprende a eyacular, con cierto ritmo, con una cierta intensidad y presión de la mano, por lo general se trata de alcanzar la eyaculación lo más rápido posible, desafortunadamente esto afecta mucho, pues es diametralmente contrario a lo que requerirá al hacer el amor con la esposa, por lo general las mujeres son mucho más lentas que el hombre para alcanzar el orgasmo, por lo que el hombre debe esperar y evitar así, los grandes problemas de la eyaculación precoz, frustrando a la mujer por no poder esperarla, en el momento que ella apenas comienza a excitarse.
Muchas mujeres expresan frustración y dicen que sienten que su esposo solo piensa en él, ¡Señoras!, discúlpenlo, no es egoísmo, es que desarrolló su sexualidad de manera solitaria, eso es lo que su cuerpo aprendió y percibe a la mujer como un objeto de masturbación, esto es tristísimo y debe trabajare entre los esposos con mucho amor y paciencia.
También sucede que el ritmo que requiere la mujer para aumentar la excitación y llegar al orgasmo, es mucho más lento que el del hombre, por lo que muchos hombres, se piensan impotentes porque requieren otros niveles de presión y ritmo como al masturbase.
El hombre que aprendió a dominarse, tiene mayor apertura y versatilidad para preocuparse por su conyugue, está atento a las necesidades de ritmo, intensidad y zonas erógenas de su esposa, permite que tengan un desarrollo sexual armonioso y sublime.
Por todo esto, es que invitamos al joven, a vivir su juventud con castidad, a fortalecer la voluntad y a luchar para ser el amo de su cuerpo, a gobernar sus impulsos y utilizar la fuerza de su espíritu para alcanzar sus más altos ideales.
¿Qué hay del clímax y del orgasmo?…
El joven tiene curiosidad en este tema, haya tenido o no relaciones sexuales, por naturaleza el joven busca sensaciones nuevas, que lo hagan sentirse vivo, que le permitan autoafirmarse, saber que es capaz de probarse, quiere tomar riesgos y experimentar en todos los campos y la sexualidad no es la excepción.
Es importante que además de conocer los pormenores, de la naturaleza humana, sepa que no es lo esencial en el amor, ¡es la cereza no el pastel!, debe ser consciente de que no vale la pena tomar el riesgo de “unos segundos de placer cambio de una eternidad de arrepentimiento”.
Es importante que conozcan la fisiología del orgasmo, que las mujeres pueden tener varios en una relación; pequeños y grandes, consecutivos o espaciados y que el hombre tiene uno y que por lo general debe esperar de 15 a 20 minutos para volver a tener otro.
Es importante que se sepan que el orgasmo vivido mutuamente como es verdaderamente sublime y hermoso, no es una cosa automática, que se logra después de años y como todo en la vida, para que sea plena la relación de amor, deben conocerse, estar atentos a las necesidades del esposa o esposo, conocer gustos, ritmos, intensidades, preferencias en las caricias y muchas cosas más que se dan a través del tiempo y en la maduración e intimidad de los esposos.
¿Qué hay de los desórdenes sexuales, pedofilia, homosexualidad, sexo anal, etc?
Las preguntas que son frecuentes, es si el sexo anal y el sexo oral son buenos o malos, si están permitidos o prohibidos, Lo más importante es que sepan, que los esposos debe cuidar su dignidad y gustos mutuamente y de común acuerdo, el respeto es la regla de oro, en las relaciones íntimas. Como hacerlo es una decisión conjunta de los esposos.
Más que si es malo o bueno, lo importante es preguntarse siempre las consecuencias, saber, que el ano tiene mucosas que protegen el cuerpo de las bacterias, coliformes del excremento y los residuos fecales, y que las mucosas de los genitales no fueron hechas para proteger al cuerpo de ello, es por eso que se pueden contraer infecciones. De igual manera podría suceder con el sexo oral.
Muchos jóvenes tienen confusión sobre la homosexualidad, pues es un tema que está muy en boga y que se promueve y se pregona en los medios de comunicación, en este tema cinco son los puntos que le deben quedar claros al joven:
- Haber tenido una relación homosexual, forzado o por decisión, no lo hace homosexual, homosexual es la persona que tiene relaciones sexuales con personas del mismo sexo con cierta frecuencia, como forma de vida.
- Que el homosexual se hace, no nace, no existe un Gen de la homosexualidad, sucede por características de la educación que recibió o por abuso sexual en la infancia, en este caso ellos no son culpables, también sucede, como resultado de los excesos y abusos en sexo ya en la edad adulta.
- Hay personas que sufren de esta tendencia, que debemos ser comprensivos, respetarlas y tratarlas con caridad, que la iglesia nos pide a nosotros el respeto y a ellos una vida de castidad.
- Que rechazar o sentir repugnancia por el acto homosexual no implica rechazar a las personas homosexuales.
- Que de ninguna manera se trata de una preferencia y una elección que se toma en un momento en la vida, que se trata de una enfermedad (y reconocerlo no implica discriminación), que si fuese una preferencia deberíamos aceptar otras tendencias, pues alguien puede decir que tiene preferencia por los niños (pedofilia), por los animales (zoofilia) o por los muertos (necrofilia).
¿Es malo el cibersexo?
EL sexting como se le llama, a las comunicaciones con contenido sexual verbal, gráfico o fotográfico, son ahora una gran moda entre los adolescentes, es muy frecuente y representa un terrible riesgo, por las consecuencias irreversibles que se dan.
Para responder esto, me permito transcribir, partes de una carta muy hermosa de una jovencita de 14 años, que como muchas otras envió a un pretendiente, una foto desnuda y que fue objeto de ciberbullying, como puede y sucede con muchísima frecuencia, porque un amigo tomo el celular e hizo pública la foto en el Face.
…lo conocí por redes sociales…empezamos jugando…me pregunto que si era virgen…fue subiendo de tono…me pidió que le enviara una foto desnuda… lo pensé dos veces… sentía la necesidad de que me dijera que estaba bonita…accedí y la envié…luego, me amenazó y me dijo que si no accedía a su petición, subiría mi foto a la nube…nunca pensé que me estaba poniendo en riesgo…no valoré en ese momento lo que en verdad soy…sabía que no estaba correcto y lo hice…El cuerpo no es mío, Dios me lo dió y tendré que dar cuentas de él a mi creador, tiene una función y cualquier uso fuera de eso es perversión…a veces tengo pensamientos que me da miedo o vergüenza que alguien más los sepa, debo compartirlos con Dios, él ya los conoce, y me ayudará a que sean honestos y puros…….las personas que piden fotos, solo lo hacen por interés y no porque en verdad me quieran…me deje llevar por los demás y fueron quitando de mi, ese pudor que tenía, esa capa que me protegía, espero que jamás me vuelva a encontrar con un chavo como él, que no me supo valorar y que aparte hizo que yo no me valorara, pero fue mi culpa por yo no valorarme a mí misma. No olvidaré esto el resto de mi vida.
¿Qué hacer con el acoso sexual?
La invitación en cualquier forma a una práctica sexual de una mayor de edad con un menor, es acoso sexual y es un delito.
Los y las adolescentes deben denunciarlo de inmediato con la persona adulta a la que le tengan confianza, para que los ayuden, mamá, papá, hermanos mayores, maestros, tíos, tutor. Por supuesto evitar los lugares y espacios en lo que se lo o la pueda topar.
El adolescente debe saber que la forma de callarlos será la amenaza, a la que no deben temer, pues es la forma en que operan los acosadores.
Con alguna frecuencia las señoritas sufren acoso sexual por parte de los padrastros, ellas deben platicarlo de inmediato con su mamá o con alguna persona que le pueda ayudar a que la mamá lo sepa. Es casi la única ayuda que puede tener una jovencita en estas circunstancias.
¿Hasta dónde se puede llegar con las caricias y abrazos?
Toda respuesta se vuelve muy fácil si atendemos al método de mirar las consecuencias.
En primer lugar asumimos que se trata de un o una joven que tiene la intención de no tener relaciones prematrimoniales, de otra forma no preguntaría los límites.
Hay que que razonar sobre las consecuencias y no perder la dignidad, con reflexiones las siguientes:
- Si se tocan los genitales, lo más probable es que ya no puedan detenerse y terminaran teniendo relaciones.
¡TU CUERPO TE HABLA!
- Escucha tu cuerpo…, si sientes sobresalto, vergüenza, sentimiento de culpa o excitación sexual señal que estas rebasando los limites.
- Si las caricias o abrazos excitan sexualmente al novio o novia, observas el el/ella, excitación o sobresalto, si quieres vivir en castidad, debes evitarlo.
- Si lo que haces se lo puedes platicar a tu mamá, seguro que estas dentro de los limites
- Si lo haces donde hay más gente sin sentir vergüenza, es que no vas en contra de tu dignidad.
- La regla de oro es; tu cuerpo te avisa, hazle caso, el sabe cuándo rebasas el límite, él te lo avisa sintiendo sobresaltos y vergüenza.
- Sobre todo, no frecuenten lugares donde por la soledad, puedan caer en la tentación de sobrepasarse y faltarse al respeto.
¡LA HORA HA LLEGADO!
¡La sexualidad es sublime y hermosa, la castidad es su capullo que la protege hasta que sea el momento de volar!
¡Los intereses económicos promueven el libertinaje sexual y por tanto amenazan la castidad y el pudor de los jóvenes!
“No hay santo sin pasado ni pecador sin futuro”, ¡es momento de dar un golpe de timón y cambiar el Rumbo!
La vida del joven líder, debe tener paz interior, para ello debe luchar por vivir una vida de castidad, la lucha, el esfuerzo, la enjundia, el autogobierno del cuerpo, es el alimento de la voluntad y del espíritu de triunfo, del joven que quiere arrebatarle a la vida todo lo que le ofrece, para lograr sus sueños e ideales, que quiere forjar de sí mismo el coloso que dios pensó para él y para ella.
¡Ha llegado la hora!, de rescatar la castidad, de desempañar la joya del pudor, de reconstruir la torre de la virtud, de que los jóvenes aprendan a dominar la bestia de su instinto y a dar su lugar y tiempo a los arlequines del placer.